Otro año que empieza y la crisis hasta la sopa de Nochevieja. Acojonados con una sensación de incertidumbre superior a la resaca .
Empiezo el día como lo acabé, metida en la cama, con el sendero de Assam entre las manos y una taza de chocolate caliente.No se me ocurre nada mejor. De aqui no me mueven ni mi marido, ni el despertador.